La diputada regional, Maria Luisa Soriano, explicó la nueva cacicada que ayer ocurría en el Pleno celebrado en las Cortes Regionales, cuando el presidente de las Cortes indicó que en los turnos de réplica debe contestar el diputado que expuso los argumentos y no otro, como se podía hacer hasta ahora. Esto es la primera vez que ocurre en la historia del Parlamento Regional, donde el presidente del ejecutivo puede intervenir cuando quiera, pero no así la oposición.
Soriano se refirió fundamentalmente al tema de empleo, con el Tercer Plan que se pondrá en marcha. Un Plan que fue firmado la semana pasada y ayer se informa en Pleno de él, algo que demuestra el respeto que se tiene por las Cortes Regionales.
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El PP solicitó la comparecencia del gobierno para explicar este Plan, que a juicio de María Luisa Soriano tiene un nombre muy rimbombante y poco contenido. Este es el tercer Plan de Empleo, el primero fue entre los años 1198-2004, cuando gobernaba el PP en la nación y no estaban transferidas las competencias en esta materia. El Plan redujo los parados en 52.000. El segundo Plan es 2004-2007, ya gobernaba Zapatero en España y Barreda en la región, y estaban transferidas las competencias. Un Plan que se saldó con 30.000 parados más. Es la diferencia entre una forma de gobernar y otra.
Ahora se hará el Tercer Plan, donde como dato destaca que desde que gobierna Barreda hay 65 parados al día, siendo las mujeres el sector más castigado, con un 60% de desempleo. Un Plan que nace con una financiación muy pobre, sólo 1.200 millones de euros para 6 años, lo que implica 200 millones de euros anuales. Una cifra, afirmó Soriano, menor que la que dedican los Presupuestos regionales al empleo, que superaba los 300 millones de euros al año. La diputada regional aseveró que se reduce claramente el presupuesto dedicado al empleo, y esa no es la medida adecuada. Un Plan de Empleo, matiza Soriano, poco creíble, ya que ni siquiera Barreda cree en él, a pesar de que en su día lo presentó como programa estrella, puesto que no estuvo presente en el debate que hubo sobre el Plan.
Finalmente la diputada popular hizo referencia a la problemática que existe en la región sobre la OCM del vino. Matizó que los agricultores iniciaron la vendimia sin saber el precio de la uva, y ayer se pagaba a 2’82 pesetas el kilogrado de uva tinta, frente a los 3’45 pesetas que se pagaba el año pasado. La uva blanca se paga más barata el kilogrado.
Soriano se refirió fundamentalmente al tema de empleo, con el Tercer Plan que se pondrá en marcha. Un Plan que fue firmado la semana pasada y ayer se informa en Pleno de él, algo que demuestra el respeto que se tiene por las Cortes Regionales.
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El PP solicitó la comparecencia del gobierno para explicar este Plan, que a juicio de María Luisa Soriano tiene un nombre muy rimbombante y poco contenido. Este es el tercer Plan de Empleo, el primero fue entre los años 1198-2004, cuando gobernaba el PP en la nación y no estaban transferidas las competencias en esta materia. El Plan redujo los parados en 52.000. El segundo Plan es 2004-2007, ya gobernaba Zapatero en España y Barreda en la región, y estaban transferidas las competencias. Un Plan que se saldó con 30.000 parados más. Es la diferencia entre una forma de gobernar y otra.
Ahora se hará el Tercer Plan, donde como dato destaca que desde que gobierna Barreda hay 65 parados al día, siendo las mujeres el sector más castigado, con un 60% de desempleo. Un Plan que nace con una financiación muy pobre, sólo 1.200 millones de euros para 6 años, lo que implica 200 millones de euros anuales. Una cifra, afirmó Soriano, menor que la que dedican los Presupuestos regionales al empleo, que superaba los 300 millones de euros al año. La diputada regional aseveró que se reduce claramente el presupuesto dedicado al empleo, y esa no es la medida adecuada. Un Plan de Empleo, matiza Soriano, poco creíble, ya que ni siquiera Barreda cree en él, a pesar de que en su día lo presentó como programa estrella, puesto que no estuvo presente en el debate que hubo sobre el Plan.
Finalmente la diputada popular hizo referencia a la problemática que existe en la región sobre la OCM del vino. Matizó que los agricultores iniciaron la vendimia sin saber el precio de la uva, y ayer se pagaba a 2’82 pesetas el kilogrado de uva tinta, frente a los 3’45 pesetas que se pagaba el año pasado. La uva blanca se paga más barata el kilogrado.
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